Comencé a tomar fotos desde muy pequeña, me gustaba agarrar la cámara réflex de mi papá. En la escuela siempre fui yo la que cargaba una cámara, la que me regaló mi papá cuando cumplí 15 años, y yo tomaba las fotos.
Desde que tengo memoria he sido una persona creativa, por eso elegí Diseño Gráfico, porque quería aprender a comunicar a través de mis creaciones.
Empecé a trabajar en la fotografía profesional hace 10 años. He tenido la suerte de capturar a muchas personas con mi cámara y desde hace 7 años, con la creación de EL ARTE DE OBSERVAR, mi primer curso de fotografía, he ayudado a cientos de personas a dominar la técnica fotográfica de forma sencilla.
¿Por qué elegí la fotografía como forma de vida? Porque me permite conectar con mi yo más profundo, expresar lo que siento y no puedo decir con palabras, transmitir mensajes claros, emocionar a otros a través de mis imágenes, contar mis propias historias y las de otras personas también.
Soy de las que se sorprenden cada día con las maravillas que nos rodean, aun cuando otros no las ven.